Reseña: La Tragedia Ashcroft

Análisis de este suplemento de Threefourteen Games por José Muñoz, AKA Tirano.

A primera vista

La principal característica de este escenario es que carece por completo de mecánicas de juego. Los escenarios de Threefourteen Games se apoyan en lo que ellos mismos han denominado Sistema de Estadísticas Descriptivas, que nos proporciona únicamente una mera descripción de las principales Características y Habilidades de los personajes y engendros en términos relativos (por debajo de la media, muy por encima de la media, poco hábil, experimentado en...)

La ventaja de este sistema es que permite que el escenario sea utilizado con cualquier sistema de juego que se os ocurra, lo cual es un rasgo bastante positivo si tenemos en cuenta que en nuestra lengua se han publicado oficialmente hasta tres iteraciones diferentes, cada una con un sistema distinto (BRP, d20 y Gumshoe), para enfrentarnos al roleo de los Mitos.

Esto, al mismo tiempo hace que sea inevitable algo más de trabajo previo por parte del director de juego para adaptar historia y personajes al sistema que desee emplear. Hay que destacar, eso si, que a medida que vas leyendo el escenario, estas adaptaciones casi van surgiendo por sí solas, de manera que los directores con algo de experiencia no deberían tener demasiados problemas a la hora de tirar de referencias para las criaturas en su sistema autóctono o convertir las descripciones en bonificadores o penalizadores llegado el caso.

La historia

En La Tragedia Ashcroft seremos trasladados hasta la Nueva Inglaterra de los años 20. En el pequeño pueblo de Saltsport los personajes deberán desentrañar el misterio de la desaparición de un niño que… pero basta de spoilers. La Tragedia Ashcroft es una historia que involucra a los Mitos desde una perspectiva clásica, esa que habitualmente se denomina purista. La historia, como indica el propio título, anticipa una tragedia que se va desarrollando en torno a los personajes a medida que ellos van explorando Saltsport.

Hablar de escenario en este caso está más que justificado. Más que una línea recta a lo largo de la cual arrastrar a los personajes, nos plantea un círculo bien delimitado que puede ser explorado en detalle mientras reunimos pistas sobre la misteriosa desaparición. El entorno de Saltsport ha sido descrito con gran nivel de detalle, y sus gentes caracterizadas cuidadosamente, lo cual facilita la interpretación del Director de Juego de cada uno de los personajes no jugadores.

Quizás la única parte negativa que puede ponerse al planteamiento general es que resulta muy difícil desentrañar completamente el misterio y que la historia (casi) se resuelve por sí misma al venir la pista fundamental determinada por acontecimientos y no por acciones de los personajes. En este sentido los directores que no estén satisfechos con este tipo de resoluciónencontrarán especialmente útiles los comentarios finales del escenario encaminados a enfocar su resolución por otros cauces.

Algunos detalles más

Puede que su mayor pega sea, pese al buen nivel general de la maquetación, su aspecto, ya que tiene algunos pequeños fallos (algunas ilustraciones se solapan ligeramente con el texto en aunque no llegan a impedir la legibilidad) que podrían haberse subsanado fácilmente.

Quizás hubiera esperado una mayor profundidad resolutiva de la historia, aunque eso hubiera mermado la cualidad purista. Pero en conjunto La Tragedia Ashcroft tiene buen aspecto, es muy jugable, sobre todo desde el punto de vista interpretativo, y aporta gran cantidad de ayudas de juego útiles.