El Taller del Nigromante - Primer PJ

En este ciclo lunar quiero plantear una idea que, a pesar de no ser el colmo de la originalidad, pretende ser al menos de utilidad para los lectores del Fanzine Rolero. La idea en cuestión se trata de crear, en cada número, el Trasfondo, Historial, Pasado… como lo queráis llamar, de un personaje completo, de una ambientación concreta y ofrecerla a todo aquel que quiera utilizar esta información para crear a sus PNJ o incluso crear un PJ sin mucho esfuerzo.

¿Por qué una idea semejante? Es sencillo: hay días en que apetece jugar una nueva partida de rol pero no apetece pensar en un personaje completo. Otras veces tus amigos te llaman con veinte minutos de antelación para que te unas a una partida, y tampoco hay tiempo de pensar en un personaje interesante y completo. Así que, como modo de subsanar este problema tan común nace este apartado, en el que presentaremos en cada ciclo lunar a un personaje con su trasfondo, personalidad, rasgos de carácter y demás aspectos narrativos.

¿Cómo utilizar esta información? Simplemente aquí exponemos un Trasfondo de personaje, unos rasgos de personalidad, unas sugerencias de cómo puede ser interpretado, y dejamos lo demás en manos del jugador (no querréis que también os hagamos la ficha con los numeritos ¿no? ¡Hay que esforzarse un poco, por Crom!) De este modo, en cada ciclo lunar presentamos a un personaje de un juego concreto, explicamos algunas opciones que pueden ser utilizadas durante la creación de personaje para reflejar el trasfondo y su forma de ser, y simplemente hay que llenar la ficha con los números. Lo demás es cosa nuestra.

Los Trasfondos que presentamos aquí son bastante concretos según el juego y ambientación al que se refieren, pero no presentan ningún problema para ser adaptados a otros entornos: sólo hay que cambiar algunos nombres y algunos detalles y tendréis a un personaje completamente nuevo.

Como esta es una nueva sección y se pretende crear algo duradero en la que todos los que deseen pueden colaborar aportando sus personajes, hablemos un poco del Canon, o dicho de otra forma, el formato estándar que será utilizado en cada artículo para cada personaje. Por Elwood.

EL TALLER DEL NIGROMANTE

- NOMBRE: Le ponemos un nombre al personaje. Luego cada uno que lo cambie si quiere, pero a nuestro engendro hay que bautizarlo de alguna manera.

- CLASE DE PERSONAJE: Aquí se ha de poner la raza y la profesión o clase de personaje hacia la que está orientado. Podemos poner varias opciones para dar algo de variedad al personaje.

- JUEGO/AMBIENTACIÓN: El sistema de juego para el que está diseñado el personaje, así como la ambientación concreta para la que se ha creado. Como ya he dicho antes, se puede modificar con un par de retoques.

- TIPO DE PARTIDA: Aquí especificaremos el tipo de partidas que serían más apropiadas para este personaje. No es lo mismo un Narizón de Fanhunter para una partida ocasional que un Ventrue de 5ª Generación Primogénito de la Camarilla que jugará una campaña MUY larga.

- TRASFONDO: Aquí vomitaremos toda la historia que hemos escrito sobre nuestro personaje. De este modo, los más literarios podrán exponer aquí sus obras de arte y entregar al mundo todas aquellas historias que siempre habían querido contar. La idea es que a través de la historia ya se pueda saber cómo es el personaje: sus miedos, sus deseos, su forma de ser…

- SUGERENCIAS DE INTERPRETACIÓN: En este apartado hablaremos de cómo proponemos que sea interpretado el personaje. ¿Es un tipo abierto y alegre? ¿Es un antipático sociópata que ama a los Hamsters? ¿Es un romantico empedernido? También expondremos nuestras sugerencias para su relación con los demás dentro de la partida. ¿Habla y participa mucho en la toma de decisiones? ¿Deja que los demás lleven la voz cantante? ¿Es un rastrero que les roba las posesiones a sus compañeros mientras duermen?

- SUGERENCIAS PARA LA CREACIÓN DEL PERSONAJE: Este es el último apartado, en el que nos encargaremos de dar algunos consejos de cara a la creación del personaje. Dotes, habilidades, poderes, opciones que sean recomendables para que el personaje sea interesante y pueda reflejar el trasfondo que hemos creado anteriormente.

Dado que muchos no estaréis convencidos aún de la idea, voy a arrojar la primera piedra y comenzar con un personaje que tengo por aquí. Para comenzar, he considerado que lo mejor era hacer un homenaje al juego que lo comenzó todo, así que he creado un personaje de Dungeons & Dragons en la ambientación oscura y maligna de Midnight.

NOMBRE:

Sar Narog, noble sarcosano.

CLASE DE PERSONAJE:

Humano Explorador, Asesino, o alguna opción de personaje que combine la capacidad de Expulsión de Muertos Vivientes con las artes en el combate.

JUEGO/AMBIENTACIÓN:

Dungeons & Dragons 3.5. Ambientación Midnight. Con unos pequeños cambios en el Trasfondo se puede adaptar también a Forgotten Realms, Greyhawk o incluso Reinos de Hierro.

TIPO DE PARTIDA:

Este personaje ha sido creado para jugar partidas de corte épico y heroico, en el que los personajes puedan actuar y realizar grandes actos para salvar el mundo de las fuerzas del Mal. Las partidas más apropiadas son aquellas que incluyen escaramuzas contra el enemigo, grandes batallas, golpes de mano contra fortalezas enemigas y exploración de lugares impíos con objeto de destruir espíritus y entes malignos.

TRASFONDO:

Desde el día en que nací no he visto más que Oscuridad. Oscuridad y maldad. La Oscuridad lo invade todo, dejando tras de sí únicamente odio, rencor, llanto y desesperación. Dicen que se llama la Sombra, y que el dios Izrador es su representante. Da igual como lo llamen, para nosotros los hombres de las Llanuras siempre ha sido sinónimo de maldad. Una maldad que debe ser erradicada. Y precisamente a eso me dedico.

Pero no avancemos acontecimientos. Mi historia comenzó en las lejanas y áridas tierras de Eren del Sur. Para los que no lo sepan, pertenezco a la noble raza de los sarcosanos. En las llanuras nací, crecí y aprendí a amar y respetar a la Naturaleza y a todos los seres vivientes. Mis padres me amaban pero nunca me malcriaron. Al contrario, siempre me imponían retos acordes a mi edad para despertar en mí la iniciativa por hacer cosas y el sentido del deber. Mis padres eran jinetes, y como yo, vivían en un estilo de vida nómada. Mis padres y otros caballeros de mis tierras formaban un shaleef, una organización de Gobierno muy común en mis tierras.

De bien joven aprendí que las cosas resultaban mucho más sencillas a lomos de un caballo que a pie. No solo por la sensación de superioridad que proporcionaba, sino por lo que significaba cuidar y respetar a otro ser vivo, convertirlo en tu compañero. A los 12 años me fue entregado mi fiel compañero, Aras, el que ha sido desde entonces mi complemento y mi mejor amigo. Con él he vivido grandes aventuras desde aquella temprana edad, cabalgando por las inmensas llanuras y las tierras salvajes.

Mi vida, como se imaginarán, era feliz. Sin embargo, es bien sabido que nada dura eternamente. De la noche a la mañana, uno de los mejores amigos de mi querido padre, Shalif Ors, nos traicionó. Habiendo escuchado rumores de una posible invasión orca, pensó que si nos traicionaba y ayudaba a los orcos, salvaría el pellejo. Así, proporcionó a esos perros verdes toda la información que precisaban sobre nuestras defensas y hábitos para facilitar su invasión. Los ataques comenzaron siendo leves y sin garra, pero ellos eran muchos más que nosotros. Una terrible noche, pocos días después de alcanzar la mayoría de edad y convertirme en un hombre, los orcos asaltaron el campamento en el que nos hallábamos mi familia, mis amigos y todo lo que yo conocía. Mi querido padre murió a manos del perro traidor Shalif mientras intentaba defenderme a mí y a mi madre. Ella me obligó a escapar para salvar la vida, aunque el fuego de la venganza ardía en mis ojos. Mi madre luchó ferozmente contra el traidor pero también cayó ante él. Con lágrimas en los ojos, salí corriendo del campamento a lomos de mi querido Aras y no miré para atrás.

Si lo hubiera hecho, probablemente habría vuelto para morir yo también en un arranque de ciega e incontrolable furia. No era el momento de enfrentarme a mi enemigo, sino de huir y entrenarme, convertirme en alguien mejor y poder volver para cumplir mi venganza contra la Sombra y el asesino de mi gente.

A los pocos días de viaje, sin comida ni agua en aquellas tierras desérticas, llegué a la ciudad de Ekin. Conocía las ciudades vagamente, aunque nunca había pasado más de una sola noche en ninguna de ellas. Sin embargo, ahora era el mejor refugio que podía encontrar. Los invasores aún tardarían bastante en llegar hasta los núcleos urbanos. Eso sin tener en cuenta que algunos de los habitantes de aquella apestosa ciudad hacían tratos con esos asquerosos orcos. Traidores, traidores todos ellos. Algún día pagarán por su traición, y su castigo no tardará mucho en llegar.

Fue una cuestión de pura suerte por la cual he conseguido llegar hasta este momento, y se lo debo a un joven pilluelo llamado Altair. Al cabo de dos meses malviviendo en Ekin, los orcos finalmente entraron, ayudados por algunos de los comerciantes de la ciudad que pensaron que era mejor unirse al enemigo que enfrentarse a él. Las patrullas de orcos cada vez eran más frecuentes. Una noche, mientras intentaba rebuscar entre los restos de comida que había dejado un posadero junto a la puerta trasera de su local, fui asaltado por una de estas patrullas. Los perros orcos reconocieron en mí a un sarcosano de las llanuras y decidieron divertirse un poco a mi costa. Intenté defenderme lo mejor que pude de ellos, pero eran cuatro y yo solo uno. Por suerte para mí, Altair pasaba por aquel lugar en aquel momento, y viendo la ferocidad con la que intentaba defenderme de los cuatro asaltantes, decidió entrar en el combate y equilibrar las cosas.

Unos minutos después y unas cuantas heridas que tardarían en cerrarse, conseguimos acabar con los orcos. Sin embargo, fue un éxito para nosotros y todo un punto de inflexión en nuestras vidas, porque derrotar a aquellos orcos supuso la prueba de que con fuerza de voluntad y coraje se puede conseguir todo lo que uno se proponga. Altair y yo nos hicimos amigos inmediatamente. Le conté la terrible masacre de mi pueblo y mis deseos de venganza. El a su vez me contó su relato, y me confesó que también andaba buscando venganza por el daño que le habían causado las fuerzas del mal. Durante un tiempo cabalgué con él y matamos muchos orcos y criaturas malignas.

En una ocasión tuvimos que enfrentarnos a una horda de muertos vivientes que habían invadido un pequeño pueblo, todos ellos enviados por Izrador, el señor de la Sombra. Tras la batalla, reflexioné sobre lo que estaba haciendo y determiné cuál debía ser mi destino. Podía perseguir a Shalif hasta la eternidad, pero no acabaría de ese modo con la Sombra, sino con mis propios fantasmas del pasado. Decidí que debía concentrarme en luchar contra las Fuerzas de la Oscuridad, concretamente con los llamados Caídos: zombis, fantasmas y demás ralea de criaturas no-muertas y servidores de Izrador.

Desde entonces, he vagado por el mundo haciendo amistad con todo aquel que esté en contra de los siervos de Izrador. He aprendido todas las lenguas y costumbres que he podido para poder cazar mejor a mis enemigos. He hecho amistad con los elfos de los bosques y otras razas amigables a mi causa.

De este modo, no descansaré hasta que vea a la Sombra expulsada de este mundo. En cuanto a mi venganza particular… digamos que soy paciente. Tarde o temprano Shalif Ors se dejará ver y cometerá un error. Y ahí estaré yo para derrotarle. Mientras tanto, intento hacer justicia allá donde voy. Probablemente no conseguiré expulsar a la Sombra permanentemente, pero… ¿acaso no merece la pena intentarlo?

SUGERENCIAS DE INTERPRETACIÓN:

Eres leal y justo, y posees un coraje y un arrojo sin igual. Sin embargo, no eres tonto y sabes cómo elegir tus peleas. Normalmente eres una persona callada, seria y con una tendencia a la melancolía por todo aquello que perdiste. Sin embargo, cuando aparece una oportunidad de hacer justicia, un ferviente valor te invade y te incita a lanzarte a la batalla para castigar a los malvados. Cuando contemplas una injusticia o una extrema crueldad reaccionas con furia y olvidas la sutileza, lo que te puede meter en más de un problema. Normalmente no deseas dirigir a los demás en un grupo, pero si nadie más lo hace aceptas el puesto con gran honor, tal y como te enseñaron tus padres. Siempre intentas ser fiel a tus compañeros, lo que implica arriesgar tu vida para salvarles si es preciso. Por supuesto, si tus camaradas demuestran tener unos valores morales y unos ideales opuestos a los tuyos, tu colaboración se limitará a mantener una actitud educada y correcta con ellos.

SUGERENCIAS PARA LA CREACIÓN DEL PERSONAJE:

- Sar Narog es un personaje que está creado fundamentalmente para castigar el mal allá donde aparezca, normalmente de forma sutil y cogiendo a sus enemigos desprevenidos, por lo que he planteado desde un principio en convertirlo en una especie de “cazador de seres malignos”. Las mejores clases de personaje para este concepto son el Explorador y, en todo caso, el Asesino (bastante modificado). Sin embargo, creo que el Explorador es la mejor porque te da opción a añadir enemigos predilectos (en este caso, pondríamos Muertos Vivientes) y tener algunas técnicas de combate muy interesantes. Y su caballo, Aras, podría ser perfectamente su compañero animal.

- Una opción muy interesante, que se plantea en la ambientación de Midnight, es adquirir el poder de expulsar y destruir muertos vivientes aunque no seas un Paladín. Por ello, también sería válido adoptar esta opción o, si no se dispone de ella, optar por la multiclase con otra profesión que disponga de este poder.

- Las características potenciadas de Sar deberían ser, en la medida de lo posible, Destreza, Constitución y, en menor medida, Fuerza e Inteligencia. Sar es un personaje con muchas habilidades y la INT le vendrá muy bien para tener más puntos que gastar.

- En cuanto a habilidades, deberían ser muy importantes las habilidades físicas y de exploración. Supervivencia, Trepar, Saltar, Equilibrio, Avistar, Escuchar, Nadar, etc. Dado que Sar Narog se ha criado en unas tierras nómadas y salvajes, las habilidades de Saber (Naturaleza) o Saber (Geografía) también son muy válidas. Dado que Sar ha viajado mucho por todo el mundo, habría que gastar unos pocos puntos en añadir Idiomas a su lista.

- Algunas dotes que recomiendo para Sar son: Rastrear, Alerta, Aguante, Pericia en Combate, Iniciativa Mejorada, Sutileza con Armas, Dureza.

- En cuanto a opciones de equipamiento, la armadura de Sar debería ser ligera y no-metálica, porque sus actividades suelen estar más orientadas a la exploración y la velocidad que no a la defensa. Es mejor llevar una armadura ligera que no penalice las habilidades físicas, aún a costa de ser más vulnerable en combate. Si se añade la dote de Iniciativa Mejorada se puede solventar esto (lo importante es golpear primero y acabar rápido el combate). En cuanto a armas, siempre me he imaginado a Sar como una especie de Tuareg o nómada oriental y, por ello, creo que una buena cimitarra y un arco largo son perfectas combinaciones para él. Un equipamiento de exploración también es muy deseable: cuerdas, cantimplora, mantas, y algunas herramientas de trampero con las que hacer pupa a tus enemigos. De todos modos, este equipamiento debería ser funcional y nada muy pesado, pues este personaje se basa sobre todo en la velocidad y la rapidez de sus acciones.

En fin, eso es todo. Esto era un ejemplo muy sencillo de la idea que he expuesto, y el personaje es pretendidamente muy simple y su historia no es nada original. Esto ha sido hecho a propósito como introducción de la idea, y he considerado mejor tomar a un personaje simple con el que los lectores podréis captar el planteamiento sin problemas. Si la iniciativa prospera, cada vez se irán añadiendo personajes más complejos y tridimensionales. Por supuesto, todo el mundo está invitado a presentar a sus propias creaciones y ayudarnos a los demás a tener personajes con un trasfondo ya creado y que nos elimine el 50% de la tarea de creación de personaje.

Por supuesto, espero opiniones, comentarios y críticas. Si hay algo de la idea que no gusta, siempre estamos a tiempo de mejorarla.